Con esta son ya son cinco las películas de Terminator -la lucha entre los humanos contra Skynet basada en el viaje en el tiempo- con una sola constante, Arnold Schwarzenegger. Digo esto porque ya son varios los directores, guionistas y actores que han pasado por la franquicia pero sólo el austriaco se mantiene, y así lo hará por las al menos dos películas que están por venir.
Algo me quedó claro en Terminator 4 -que dicho sea de paso no me gustó mucho- es que todo es posible. Partiendo de este punto me parece absurdo ponerse a buscar razonamientos lógicos, coherencias y demás basamentos para algo que, lean bien, es fantasía.
Dejando esto claro, y abstrayéndome un poco de lo que es la saga, la película me gustó. Es entretenida, está llena de acción, buenos efectos (Terminator nunca defrauda en este apartado) y hasta tiene algo novedoso, un toque de buen humor. Tal vez esto último le quite un poco de seriedad a todo el asunto junto a las múltiples opciones no siempre coherentes que se abren a cada instante con el transcurrir de la película. En conclusión, Terminator dejó de ser una saga seria de Sci-Fi para convertirse en poco más que entretenimiento y esto lo hace bien.
Como buen fan de Game of Thrones vi con buenos ojos la inclusión de Emilia Clarke en el papel de Sarah Connor. El australiano Jason Clarke en el papel de Jhon Connor tampoco estuvo mal en un casting en donde "Arny" siempre se roba el show y es de lo mejor de la película.
A mi me gustó, la disfruté que es lo importante, y quedó abierta para las siguientes entregas. Más info en imdb.com.
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